domingo, 24 de octubre de 2010

Por favor, acuérdate...


Paradojas de nuestro tiempo: tenemos edificios más altos y temperamentos más reducidos, carreteras más anchas y puntos de vista más estrechos. Gastamos más pero tenemos menos, compramos más pero disfrutamos menos. Tenemos casas más grandes y familias más pequeñas, mayores comodidades y menos tiempo. Tenemos más titulaciones académicas pero menos sentido común, mayor conocimiento pero menor capacidad de juicio, más expertos pero más problemas, mejor medicina pero menor bienestar.
Bebemos demasiado, fumamos demasiado, despilfarramos demasiado, reimos muy poco, conducimos muy rápido, nos enojamos demasiado, nos desvelamos demasiado, amanecemos cansados, leemos muy poco, vemos demasiada televisión y rezamos muy rara vez.
Hemos triplicado nuestras posesiones pero reducido nuestros valores. Hablamos demasiado, amamos demasiado poco y odiamos muy frecuentemente.
Hemos aprendido a ganarnos la vida, pero no a vivir. Añadimos años a nuestras vidas, no vida a nuestros años. Hemos logrado ir y volver de la luna, pero se nos dificulta cruzar la calle para conocer a un nuevo vecino. Conquistamos el espacio exterior, pero no el interior. Hemos hecho grandes cosas, pero no por ello mejores.
Hemos limpiado el aire, pero contaminamos nuestra alma. Conquistamos el átomo pero no nuestros prejuicios. Escribimos más pero aprendemos menos. Planeamos más pero logramos menos. Hemos aprendido a apresurarnos, pero no a esperar. Producimos ordenadores que pueden procesar mayor información y difundirla, pero nos comunicamos cada vez menos.
Estos son tiempos de comidas rápidas y digestión lenta, de hombres de gran talla y cortedad de carácter, de enormes ganancias económicas y relaciones humanas superficiales. Hoy en día hay dos ingresos pero más divorcios, casas más lujosas pero hogares rotos. Son tiempos de viajes rápidos, pañales desechables, moral descartable, ligues de una noche, cuerpos obesos y píldoras que hacen todo, desde alegrar y apaciguar, hasta matar.
Son tiempos en que hay mucho en el escaparate y muy poco en la bodega. Tiempos en que la tecnología puede hacerte llegar este mensaje y en que tú puedes elegir compartir estas reflexiones o simplemente borrarlas.
Acuérdate de pasar algún tiempo con tus seres queridos porque ellos no estarán aquí siempre. Acuérdate de ser amable con quien ahora te admira, porque esa personita crecerá muy pronto y se alejará de tí. Acuérdate de abrazar a quien tienes cerca porque ese es el único tesoro que puedes dar con el corazón, sin que te cueste ni un céntimo. Acuérdate de decir te amo a tu pareja y a tus seres queridos, pero sobre todo dilo sinceramente. Un beso y un abrazo pueden reparar una herida cuando se dan con toda el alma. Acuérdate de cogerte de la mano con tu ser querido y atesorar ese momento, porque un día esa persona ya no estará contigo.
Date tiempo para amar y para conversar, y comparte tus más preciadas ideas.
Y siempre recuerda:
LA VIDA NO SE MIDE POR EL NÚMERO DE VECES QUE TOMAMOS ALIENTO, SINO POR LOS EXTRAORDINARIOS MOMENTOS QUE NOS LO QUITAN.
(George Carlin)

sábado, 23 de octubre de 2010

O R A C I Ó N


De este día en adelante, mi vida será armoniosa y abarcadora.

Déjame aprender a aceptar los distintos puntos de vista de la gente,

porque todos buscamos la misma felicidad y alegría en la vida.

Que yo no condene a nadie porque se vea, piense o actúe diferente.

Déjame realizar la unidad espiritual tras la diversidad en la creación

y recordar siempre que somos miembros de la misma familia divina.

A mi propio modo, humildemente, pueda yo contribuir con la paz,

la alegría y la armonía del mundo. (S. Satchidananda)

martes, 19 de octubre de 2010

EL EJÉRCITO PERDIDO




Me reafirmé en el convencimiento que siempre había tenido: la naturaleza no concede todos sus dones a una sola criatura. A unas les da una cosa, a otras otra. El ruiseñor es pequeño e insignificante, pero su canto es una melodía sobrecogedora, la más armoniosa que haya creado la naturaleza. También pensé que en el paraíso terrenal cada cosa debía de ser perfecta y que los dioses, al principio, debían de haber dado a las aves que desplegaban delante de mí su deslumbrante belleza un canto semejante al de los ruiseñores para que se manifestase su infinito poder. (Valerio Massimo Manfredi)


domingo, 17 de octubre de 2010

EL CUERPO SUSURRA, DICE O GRITA LO QUE LA MENTE NO PUEDE O QUIERE COMPRENDER




UN RESFRIADO OCURRE CUANDO EL CUERPO NO LLORA...





UN DOLOR DE GARGANTA APARECE CUANDO NO ES POSIBLE COMUNICAR
LAS AFLICCIONES...





EL ESTÓMAGO ARDE CUANDO LA RABIA NO CONSIGUE SALIR...





LA DIABETES INVADE CUANDO LA SOLEDAD DUELE...





EL CUERPO ENGORDA CUANDO LA INSATISFACCIÓN APRIETA...





EL DOLOR DE CABEZA DEPRIME CUANDO LAS DUDAS AUMENTAN...





EL CORAZÓN RENUNCIA CUANDO EL SENTIDO DE LA VIDA PARECE TERMINAR...





LA ALERGIA APARECE CUANDO EL PERFECCIONISMO ES INTOLERABLE...





LAS UÑAS SE QUIEBRAN CUANDO LAS DEFENSAS ESTÁN AMENAZADAS...





EL PECHO APRIETA CUANDO EL ORGULLO ESCLAVIZA...





LA PRESIÓN SUBE CUANDO EL MIEDO APRISIONA...





LAS NEUROSIS PARALIZAN CUANDO EL "NIÑO INTERNO" TIRANIZA...





LA FIEBRE SUBE CUANDO LAS DEFENSAS DETONAN LAS FRONTERAS DE LA INMUNIDAD....





¿ Y TUS DOLORES CALLADOS? ¿CÓMO HABLAN ELLOS A TU CUERPO?